Técnica de esquí: tipos de curvas y cómo trazarlas

Aquí os traemos los diferentes tipos de curvas y la forma más adecuada de trazarlas, una vez que domines la técnica de esquí en paralelo y sepas clavar los cantos.

Para simplificarlo hemos dividido las curvas en función de su radio (corto, medio y amplio), pero la realidad es mucho más compleja, ya que los tipos de curvas son infinitas, y el radio de la curva no es el único factor a tener en cuenta (el radio de giro del esquí, la agresividad del esquiador, la inclinación de la pendiente,… son otros factores importantes). Aún así, esta es la manera más sencilla de transmitirlo.

Curvas de radio corto

Son curvas pequeñas, como las que hacemos para coger las puertas de un eslalon, con un riesgo leve de caída, en las que predomina la técnica del esquiador frente a la fuerza o el arrojo.

Consejos técnicos

  • Velocidad muy controlada.
  • Posición general centrada (la posición no debe ser excesivamente avanzada) y más vertical (con poca inclinación lateral del cuerpo). El tronco debe estar rotado con respecto a las piernas, el cuerpo mira hacia la pendiente mientras las piernas se alinean con la curva y los esquís. La mirada se dirige a escasos metros por delante del esquí.
  • Esquís relativamente juntos por la poca inclinación lateral y con una presión baja de los cantos sobre la nieve (predomina el derrapaje en la primera mitad del giro).
  • La presión de las espinillas sobre la lengüeta de las botas es menor al inicio de la curva y aumenta hacia el final a causa de una flexión dorsal de los tobillos.
  • Clavado completo del bastón marcando el inicio de cada curva.
  • El impulso debe ser fuerte, dosificando el esfuerzo con rapidez para poder trazar muchas curvas por unidad de tiempo.
  • El juego de flexión y extensión de las piernas es el principal mecanismo productor del giro.
  • El giro es más aeróbico, te mueves más pero no haces mucha fuerza con las piernas, prima la agilidad.

Curvas de radio medio

Son curvas como las que se realizan al descender por un eslalon gigante, con un importante riesgo de lesión en caso de caída, en las que la técnica y la potencia deben fusionarse armónicamente. Estos giros son los más habituales en pista, ya que son aptos para todos porque no requieren arriesgar excesivamente ni una importante fuerza como los giros amplios y tampoco demandan una técnica tan depurada como los cortos.

Consejos técnicos

  • Velocidad media.
  • Posición general del esquiador más adelantada (para adaptarte a una velocidad mayor), y con una cierta inclinación lateral. El tronco y las piernas esta vez se tienden a alinear con la curva y los esquís en la parte final del giro (aunque existe una pequeña anticipación, en el inicio de la curva, del tronco que produce una leve rotación con respecto a las piernas; los esquís siguen al tronco). Manos y brazos bien adelantados con respecto al tronco. La mirada se dirige a una cierta distancia para anticiparse a lo que pueda acontecer.
  • Esquís ligeramente más separados que en los giros cortos, clavando cantos de una forma más contundente ya en la primera mitad del giro aunque sigue habiendo algo de derrape en el inicio de la curva.
  • La presión de las espinillas es mayor y más mantenida que en el giro anterior.
  • Clavado de bastón incompleto, se arrastra el bastón interior sobre la nieve, lo que nos ayuda a graduar nuestra inclinación y a acoplar nuestro ritmo a los giros.
  • El impulso es suave y progresivo, el giro se inicia con más lentitud que el corto.
  • La flexo-extensión de las piernas puede utilizarse pero no es tan relevante como en el giro corto, y existe un claro “pedaleo”.
  • Este giro es menos aeróbico que el corto, ya que nos movemos más lentamente pero hay que pisar con más fuerza conforme la velocidad aumenta.

Cuevas de radio amplio

Son similares a las que se realizan al descender en una prueba de supergigante o descenso, con un riesgo muy alto de lesión en caso de caída (recomendamos llevar casco) debido a la velocidad, en los que se precisa una gran potencia muscular y una concentración mental absoluta.

Consejos técnicos

  • Gran velocidad.
  • Posición general del esquiador muy agresiva (adelantada) y con una fuerte inclinación lateral. La rodilla interior será como la punta de una flecha guiando el avance y las manos lucharán por tener una posición adelantada. El tronco y los esquís permanecen alineados, apuntando en la misma dirección como si fuéramos por un carril. La mirada va dirigida lejos anticipando lo máximo posible.
  • Esquís bien separados, canteando radicalmente, ya que se gira sobre el canto, y en el momento del cambio de curva se gira rápidamente de uno a otro.
  • Prácticamente no hay derrapaje porque hay una gran presión de los cantos de los esquís.
  • La presión de las espinillas sobre la lengüeta debe ser todo el peso del esquiador, produciendo un empuje potente y mantenido.
  • Clavado de bastón irrelevante.
  • El impulso corporal es muy progresivo adaptándose a la mayor longitud del arco del giro que vamos a realizar.
  • No existe juego de flexión y extensión en las piernas ya que trazamos la curva por pedaleo puro; la pelvis pasa de izquierda a derecha sin apenas subir y bajar al girar.
  • Esta curva se traza de una forma prácticamente anaeróbica, con escasos desplazamientos corporales y medidos pero desplegando una gran potencia.

Esperamos que el artículo te ayude a trazar unas curvas perfectas