Escalada, tipos de agarres

En escalada podemos decir que hay una infinidad de tipos de agarres que nos vamos encontrando cada vez que vamos a roca, pero obviamente podemos o al menos intentamos clasificarlos según sus características u orientación. Aunque todos hemos visto presas con formas indescriptibles o con formas con cierto parecido a objetos del día a día que la gente decide ponerles nombre como cógete de la oreja o pilla esa sonrisa, siempre tenemos una clasificación básica:

Regletas: se trata de un canto plano de 3 cm o menos de profundidad. Tenemos dos maneras eficaces de agarrar esta presa: en primer lugar, debemos intentar que el máximo de la superficie de los cuatro dedos(el dedo gordo no) esté en contacto con la profundidad del agarre, el arqueo realizado debe ser de un ángulo de 90 grados con los nudillos. Si cerramos la mano más de 90 grados estaremos forzando los tendones y acabarán resintiendo, por el otro lado, si el ángulo es superior perderemos eficacia y posiblemente resbalando. La segunda forma en la que podemos coger la regleta es añadiendo a la manera anterior el dedo gordo sobre el dedo índice añadiendo más potencia.

En cuanto a la posición del cuerpo a la hora de agarrar las regletas no es tan estricta cómo otras presas, dado que colocar bien el centro de gravedad depende de muchas posturas con este tipo de agarres. No existe una postura específica.

Cantos romos: nos referimos a las presas en declive hacia delante que agarramos con los dedos extendidos o semi-arqueo . Debemos intentar usa la mayor superficie posible para que resulte más fácil. Esta vez el centro de gravedad es importantísimo, por lo que tenemos que intentar estar pegados a la pared y que nuestro tronco esté en linea verticalmente con el canto.

Agujeros (tridedos, bidedos, monodedos): estas presas se suelen agarrar con los dedos en extensión o semi-arqueo, dado que suelen ser estrechos y profundos impidiendo el arqueo de 90 grados. Dependiendo el tamaño del agujero diferenciaremos los que podemos introducir tres dedos (tridedos), dos dedos (bidedos) o un dedo (monodedo). Tenemos que tener cuidado ya que son bastante lesivos estas presas, ya que todo el esfuerzo se reduce en pocos dedos, por eso muchos escaladores realizan entrenamientos específicos para fortalecer más la mano.

Invertidos: cualquier tipo de presa que agarres con la palma mirando hacia el cielo. La posición adecuada para estas presas debe ser realizando dos fuerzas en dirección contraria, es decir, con las manos hacia arriba y los pies hacia abajo. Debemos tener en cuenta que cuanto más alto tengamos el centro de gravedad más fácil será el agarre, y cuanto más abajo peor.

Pinzamientos: se trata de las presas en que el dedo gordo está en oposición a los otros cuatro dedos realizando una pinza. En este caso no hay una posición específica, dado que permite muchísimas combinaciones de movimientos del centro de gravedad.

En líneas generales podemos clasificar de esta manera las diferentes presas, aunque sin lugar a duda siempre nos sorprendemos con nuevos agarres que nos ofrece la montaña.